En Iberdrola lideramos la transición energética hacia un modelo sostenible a través de nuestras inversiones en energías renovables, redes inteligentes, almacenamiento de energía a gran escala y transformación digital para ofrecer los más avanzados productos y servicios a nuestros clientes.
Trabajamos con el propósito de construir un modelo energético eléctrico, saludable y accesible, basándonos en el bienestar de las personas y la preservación del planeta. La crisis global surgida en 2022 reafirma nuestra visión a largo plazo y confirma la necesidad de una fuerte inversión para poner fin a la dependencia de los combustibles fósiles, que en 2022 cubrían todavía el 75 % de la demanda de energía. Por eso, el Plan Estratégico Iberdrola 2023-2025 compromete 47.000 millones de euros para impulsar la transición energética desde sus distintos ejes.